Pocos accesorios como unos buenos tacones son capaces de estilizar tanto la figura de una mujer: nuestras piernas parecen más largas y ponen el broche de oro a cualquier conjunto. Odiados por unas, pero también amadas por muchas otras. La mayoría. Sobre todo mientras nuestros pies no se empiezan a resentir.

Pero debemos ser conscientes de que los tacones son un arma de doble filo. Un uso continuado puede tener consecuencias negativas para la salud. ¡Atenta! Sigue leyendo

Según un estudio de Vichy, el 60% de las mujeres están preocupadas por sus ojeras y el 80% por las bolsas en los ojos. ¿Eres una de ellas? 





