Parece que el frío empieza a notarse, los termómetros comienzan a bajar y nuestro rostro se ve afectado directamente por estos cambios. ¡Necesitas preparar la piel para el frío! Seguramente has notado en alguna ocasión tu piel más rojiza, especialmente en la nariz y los pómulos, más opaca y reseca, e incluso en ocasiones escamada. Debes mimar y cuidar tu piel para que luzca bonita, pero sobre todo para que esté sana. En Rosvel Parafarmacia queremos orientarte y compartir contigo nuestros 5 secretos para lograrlo.
Tabla de contenidos
5 consejos para cuidar tu rostro
Lavar la cara con agua tibia
El primer paso que debes tener en cuenta a la hora de cuidar tu piel es mantenerla limpia, lo ideal es utilizar agua tibia, ya que demasiado caliente resulta agresiva. La contaminación y los residuos de productos afectan a nuestro cutis, por lo tanto es sumamente importante lavarte la cara todas las mañanas, pero también todas las noches, independientemente de que utilices o no cosméticos.
¿Sabías que llevamos nuestras manos a la cara unas 2.500 veces al día? Por lo tanto, es de vital importancia mantener las manos limpias.
Hidratación
Durante todo el año es importante hidratar nuestra piel, pero normalmente la cuidamos y protegemos más en el verano ¡error! , cuidarla en el verano es fundamental, pero durante la época invernal es importante seguir protegiendo nuestro rostro, ya que la radiación solar nos sigue afectando. Por eso, es recomendable aplicar protector solar también durante el invierno, prestando especial atención a las zonas donde haya nieve, ya que esta produce un efecto espejo y refleja el 80% de la radiación solar. No te olvides de proteger tus labios.
¿Sabes identificar tu tipo de piel?
Para preparar la piel para el frío y protegerla en invierno es necesario saber qué cuidados específicos necesita cada tipo de cutis, debes tener claro cuál es el tuyo.
Piel normal
Nos referimos a una piel normal cuando hablamos de una piel en equilibrio, el tacto es suave y el tono uniforme.
Piel seca
La piel que produce menos sebo que la piel normal, al producir menos sebo carece de lípidos que retengan la humedad y que forman una especie de escudo contra influencias externas. Cuando hablamos de una piel muy seca, pueden aparecer picores y molestias en distintas zonas de la piel.
Piel grasa
Por el contrario, es la piel que produce demasiado sebo, y es necesario regularla para contrarrestar la seborrea. La piel grasa presenta un aspecto brillante, los poros se encuentran dilatados, la textura es irregular y es propensa a los puntos negros. Es fundamental utilizar productos “oil free”, libres de aceites que puedan aportar grasa extra a la piel.
Piel mixta
Es, por así decirlo, una piel combinada. Unas zonas tienen a producir demasiado sebo, normalmente la llamada zona T (frente, nariz, barbilla) y el resto de zonas tienden a permanecer secas e incluso escamarse.
Selecciona los productos más adecuados
No todas las pieles son iguales, por lo tanto no todas necesitan los mismos cuidados. Debes conocer las características de tu piel y aplicar los productos que mejor encajan con tus necesidades.
–Hidratantes de día: No sirve que apliques tu body milk habitual sobre tu rostro, es necesario utilizar una crema específica para la cara, debes elegir una crema que se adecue a tipo de piel para mantenerla hidratada pero no grasa, además de mantener tu piel cuidada notarás como el maquillaje se adhiere mejor y tu rostro luce más bonito.
–Hidratantes de noche: Las hidratantes específicas para aplicar por la noche normalmente son más grasas, ya que actúan mientras dormimos, ayudando a nuestra piel y reparándola de manera intensiva.
– Mascarillas y exfoliantes: Aplicar mascarillas y exfoliantes especiales para la cara es algo muy recomendable durante el invierno, pues ayudan a eliminar las células muertas, limpian tu rostro y aportan vida.
En Rosvel Parafarmacia te ofrecemos una línea de productos faciales que te ayudarán a mantener tu piel sana de cara al invierno.
¡No dejes escapar las ofertas especiales que encontrarás en nuestra tienda online!
Cuidado con los cambios de temperatura
En la medida de lo posible debes huir de los cambios bruscos de temperatura, ya que esto aumenta la posibilidad de aparición de capilares dilatados en la cara (especialmente en las mejillas). Además, el frío puede provocar rojeces, escozor… Son especialmente sensibles a estos cambios las pieles más finas, sensibles y delicadas, por lo que necesitan un cuidado extra ante este tipo de situaciones.
Cuida tu alimentación
Lo que comes afecta directamente a tu piel, es importante mantener una alimentación sana. Llevar a cabo una dieta variada, pobre en hidratos de carbono de absorción rápida y rica en vitaminas, acompañada de la ingesta de al menos 1,5 litros de agua al día te ayudará a mantener tu piel sana.
Algunos de los alimentos que más favorecen el cuidado de tu piel:
– Las zanahorias son las hortalizas más beneficiosas para nuestra piel, ya que tienen altos niveles de beta-caroteno, un buen aliado antioxidante que se convierte en vitamina A.
– Los tomates suponen una de las mejores defensas para nuestra piel. Al igual que las zanahorias, el tomate tiene poder antioxidante y protege a la piel de daños solares.
– El brócoli y en general toda la familia de las coles, es rico en antioxidantes. Tienen aportes relevantes de vitamina C (productora de colágeno) y vitamina E (protectora de las membranas celulares de la piel).
– Las avellanas son una de las mejores fuentes de vitamina E, que nutre la piel y protege del sol.
– Pescados azules: son una fuente importante de omega-3, que son grasas que permiten una mayor permeabilidad de las membranas y, en consecuencia, un mejor funcionamiento celular, además de aportar calcio a nuestros huesos.
– El chocolate negro es el toque dulce que necesita tu piel. El chocolate te ayuda a aportar la humedad que tu piel necesita, reduce las rojeces y la aspereza.
En resumen, es importante tener en cuenta tres aspectos fundamentales a la hora de cuidar y preparar tu piel para el frío: mantenerla limpia, elegir los productos adecuados y ser constante. Acude a un especialista ante cualquier problema o cambio brusco en la piel.
Si sigues nuestros consejos, ¡podrás lucir tu mejor cara este invierno!