Padres que apoyan la lactancia materna frente a otros muchos que optan por el biberón. ¿Os suena? Este es un tema que lleva años debatiéndose y que enfrenta hasta límites insospechados a padres que “pelean” por defender sus ideas.
Ventajas de dar el pecho
La leche materna es el alimento perfecto. Así lo considera la Organización Mundial de la Salud (OMS), que aconseja que todo recién nacido esté alimentado exclusivamente de leche de su madre durante al menos sus primeros 6 meses de vida. Contiene los nutrientes necesarios para que el bebé crezca fuerte y sano.
Amamantar al bebé tiene múltiples beneficios, entre los que se encuentran:
- Mejoran la inmunidad del bebé, ya que la leche materna aporta anticuerpos que lo protegerán ante posibles infecciones respiratorias, de oído,… e incluso meningitis.
- Previene las intolerancias alimenticias y las alergias.
Para las madres a las que se le hace imposible estar en el momento de la toma, existe una fantástica opción: el sacaleches, para así no renunciar a la leche materna incluso cuando la madre está ausentes. Además, hay mujeres que optan por el sacaleches para donarla.
Ventajas de usar biberón
A muchas mujeres les resulta imposible amamantar a su bebé. Aunque los especialistas consideran que la leche materna es la opción adecuada, para muchas madres no la es.
En ese caso, la leche de fórmula suple de forma eficaz la leche materna, puesto que cubre todas las necesidades nutricionales del recién nacido. Opta por leche infantil de primeras marcas como Almirón, Blemil, Sanutri o Novalac.
Además, la lactancia artificial también ofrece muchos puntos positivos. Estos son alguno de ellos:
- Comodidad: otras personas podrán alimentar al bebé sin tener que depender de la madre, que podrá continuar con sus obligaciones laborales sin depender de las tomas de su hijo.
- Control en la cantidad de alimento, algo que se complica con la lactancia natural.
- Más tiempo. La leche materna se digiere más rápido que la leche de fórmula por lo que la sensación de saciedad perdurará durante más horas.
Sea cual sea tu caso, lo importante es que conozcas ambas opciones. Si amamantas a tu bebé, no será raro que algún día tengas que optar por la leche de fórmula, una decisión que debes tomar con la mayor naturalidad posible, sin que te produzca inseguridad o dudas.
Y tú, ¿le has dado el pecho a tu hijo o el biberón? Cuéntanos tu experiencia. ¡Esperamos tus comentarios!