El cáncer de piel: los lunares

Ayer día 13 de junio fue el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel. El sol aporta beneficios a nuestra salud, sin embargo, una excesiva exposición provoca un prematuro envejecimiento de la piel y la aparición de lesiones cancerosas.

Para prevenir un posible cáncer de piel es muy importante vigilar los lunares y proteger la piel con crema solar.

¿Cómo vigilar tus lunares?

Las personas que tienen un mayor riesgo de desarrollar un melanoma son aquellas que tienen lunares atípicos, con grandes dimensiones y con perfiles o bordes irregulares. No obstante, la mitad de los melanomas surgen en pieles sanas. Por esta razón es muy importante estar pendiente del desarrollo de los lunares.

Acude a tu médico si tienes un lunar o lesión con estas cinco propiedades porque habrá la posibilidad de que hayas desarrollado un melanoma (se conoce como la regla del ABCDE):

A. Asimetría en los bordes de la lesión. Si divides la lesión en dos por una línea imaginaria y cada mitad es diferente en forma y tamaño a la otra. Los melanomas pueden además ser planos o elevados.

B. Borde irregular. Los bordes de un melanoma dan una impresión de rotos, borrosos o poco definidos.

C. Cambios de color o tonalidades en su superficie (marrón, negro, rojizo).

D. Diámetro. Un diámetro mayor de 6 mm debe despertar sospecha.

E. Elevación de la superficie de un lunar que antes era plano.